domingo, 24 de marzo de 2013

Foto

LAS APARIENCIAS ENGAÑAN

Un matrimonio que no podía tener hijos, fueron un día de compras y se enamoraron de un perrito cachorro que vendían en una tienda de animales. Se llevaron al perro y le colmaron de cariño y atenciones, hasta que un día comprobaron con sorpresa que íban a ser padres.
Obviamente el perro notó que ya no recibía las mismas atenciones y cuando la preciosa niña nació y la llevaron a casa, el perro comenzó a sentir celos de la pequeña.
Un día, la pareja había invitado a unos amigos a una barbacoa en el jardín de su casa. Estában disfrutando mientras la niña dormía plácidamente en su cunita. De repente, comenzaron a escuchar unos sollozos que provenían de la nena y subieron a ver que ocurría.
Antes de entrar a la habitación vieron salir al perro con la boca ensangrentada y dedujeron que había hecho daño a la niña. Entonces el padre sacó una escopeta y disparó al perro en la cabeza, matándolo. Cuando entraron en la habitación, vieron a la niña jugando y a su lado había una serpiente cascabel, la cual había destrozado el perro.
Antes de dar algo por sentado, deberíamos verificar si lo que pensamos es realmente así porque las consecuencias de nuestras acciones pueden llegar a ser muy dañinas e injustas.
Ya lo dice Juan 7: 24: "No juzguéis según las apariencias..."

No hay comentarios:

Publicar un comentario