lunes, 21 de julio de 2014

SALUD: EL HIERRO


   El organismo de un adulto contiene entre 3 y 4 gramos de hierro. Ésta es ciertamente una cantidad muy pequeña, pero realiza funciones de importancia vital. La mayor parte del hierro se encuentra en la sangre formando parte de la hemoglobina, que da el típico color rojo y permite el transporte del oxígeno desde los pulmones hasta todas las células.
   En el organismo el hierro no existe como elemento químico aislado, que se comporta como un auténtico veneno, sino unido a proteínas, especialmente la llamada ferritina.
 
Necesidades diarias de hierro

   La mayor parte del hierro que hay en el organismo se recicla, por lo que en condiciones normales las pérdidas de este mineral son muy pequeñas. El hierro se pierde con las células que se descaman de la piel y de las mucosas que revisten el tuvo digestivo y las vías urinarias. Esto supone 0,91 miligramos diarios para un adulto.
   En ciertas ocasiones aumentan las necesidades de hierro:

  • Las mujeres que menstrúan pierden 2 miligramos diarios con la sangre menstrual, por lo que una mujer pierde durante los días de la regla tres veces más hierro que normalmente.
  • Durante el embarazo y la lactancia aumentan las necesidades de hierro, pero esto queda compensado con el hecho de no haber pérdidas menstruales. Por ello, las necesidades son las mismas en una mujer que regla que en una embarazada o lactante.
  • En la adolescencia se intensifica la demanda de hierro como consecuencia del crecimiento y de la aparición de la menstruación en las muchachas.
  • cualquier hemorragia anormal produce pérdidas importantes de hierro, que pueden provocar facilmente un estado anémico.
   El hierro de los vegetales se encuentra en forma de sales férricas, mientras que el de los alimentos animales, llamado también hemo-ferro, aparece en forma de sales ferrosas. Ambos tipos de hierro se absorben con dificultad en el intestino, hasta el punto de que sólo de un 10% al 20% del hierro de procedencia vegetal es absorbido, y un 30% del hierro que se encuentra en la carne. Por ello, al calcular las necesidades diarias, se debe pensar en ingerir, como medida de seguridad, diez veces más del hierro que realmente necesitamos.

El hierro en la alimentación vegetariana

   El hierro se halla ampliamente distribuído en todos los alimentos animales y vegetales, y una dieta variada aporta sobradamente las necesidades diarias, incluso para las mujeres.
   La menor absorción del hierro procedente de los vegetales, se compensa sobradamente por dos hechos:


  • La concentración de hierro en la mayoría de los alimentos vegetales es más alta que en las carnes, excepto en el hígado. La leche apenas contiene hierro.
  • Se ha comprobado que la vitamina C, mucho más abundante en la dieta vegetal, aumenta considerablemente la absorción de hierro, llegando a duplicarla. Esta es una importante razón para tomar en cada comida hortalizas y/o fruta frescas, ricas en vitamina C.


Durante una época se pensó que la carne era necesaria por su contenido en hierro y que quienes no la tomaban, corrían el riesgo de anemia. Pero hoy sabemos que la dieta vegetal es superior en cuanto a contenido de hierro, y que su absorción no plantea problemas si se consumen abundantes alimentos frescos ricos en vitamina C.
   Los frutos secos (nueces), las legumbres y los cereales poseen más hierro que la carne, a excepción del hígado. La harina de soja, con la cual se fabrica la carne vegetal, tiene tres veces más hierro que la carne de vaca (la de mayor contenido en hierro). La OMS recomienda el consumo abundante de melocotones, albaricoques, ciruelas, uvas y pasas, como excelentes fuentes de hierro, por su fácil digestión y absorción. El alga espirulina, la levadura de cerbeza y el polen son, junto con la soja, los alimentos vegetales más ricos en hierro.

RECETAS: ALBONDIGAS DE PATATAS Y SETAS


Ingredientes


  • 1/2 kilo de patatas
  • 250 gramos de níscalos
  • 2 huevos
  • 2 dientes de ajo
  • perejil
  • 3 cucharadas de pan rallado
  • 172 cucharadita de pimentón
  • aceite de oliva


Preparación


  1. Lavar bien las patatas y cocerlas, sin pelar, en agua con sal
  2. Limpiar bien los níscalos en seco, tanto como se pueda, quitando toda la tierra y partes estropeadas con un cuchillito. Lavarlos después con agua, pero evitando los remojos. Picarlos muy finamente
  3. Rehogar los níscalos en una sartén con tres cucharadas de aceite. Cuando se les esté agotando su jugo, añadir los ajos y el perejil, todo picado muy menudo
  4. Cuando estén cocidas las patatas, pelarlas y aplastarlas con un tenedor, añadirles los níscalos rehogados, los huevos batidos, el pan rallado y el pimentón. Amasarlo todo bien y formar las albóndigas no muy gordas
  5. Freír las albóndigas en una sartén con el aceite, procurando que se doren uniformemente. Apartar de la sartén con una espumadera y colocarlas sobre papel absorbente para que escurran el aceite sobrante. 

sábado, 19 de julio de 2014

HIMNOS CRISTIANOS


La cruz de Cristo nos recuerda el infinito amor de Dios.

ESTUDIOS BÍBLICOS: LA LEY DE DIOS Y LA GRACIA

     La ley de Dios y su gracia no compiten ni se oponen entre sí. Algunos han pensado que debido a que somos salvos por gracia (Efesios 2: 8), no necesitamos obedecer la santa ley de Dios. Otros han asumido la idea de que en el Antiguo Testamento todo era la ley, y que en el Nuevo Testamento todo es gracia sin ley. Nunca es seguro seguir lo que la gente piensa. Nuestra única seguridad está en averiguar qué dice la Biblia, y en seguir esa Palabra de verdad.

   1. ¿A cuántos ha rebelado Dios su gracia?

      "La gracia de Dios se ha manifestado para salvación a todos los hombres." Tito 2: 11, Edición de 1.960.

Nota: La gracia es el inmerecido favor de Dios y su amor en acción. Es el poder que opera en la vida que se rinde del todo a él. Cuando un pecador arrepentido acepta a Cristo, Dios le acredita la justicia de Jesucristo.

   2. ¿Conocía Moisés la gracia de Dios?

       "Pasando Jehová por delante de él, proclamó: Jehová, Jehová, fuerte, misericordioso y piadoso; tardo para la ira, grande en benignidad y verdad." Éxodo 34: 6.

   3. ¿Vivió Noé bajo la gracia?

      "Empero Noé halló gracia en los ojos de Jehová." Génesis 6: 8.

   4. ¿Qué medio usó Dios para poner su gracia al alcance de los hombres?

      "Siendo justificados gratuitamente por su gracia, por la redención que es en Cristo Jesús; al cual Dios ha puesto en propiciación por la fe en su sangre, para manifestación de su justicia, atento a haber pasado por alto, en su paciencia, los pecados pasados." Romanos 3: 24, 25.

   5. ¿Cuáles son algunos resultados de la gracia?

      Otorga la remisión, el perdón de los pecados (Romanos 3: 25). Trae vida eterna al creyente (Romanos 5: 21). Ayuda al creyente a renunciar al pecado (Romanos 6: 1- 4), y le ayuda a realizar la obra que Dios le ordena (Efesios 2: 8- 10). Nuestra obediencia a la voluntad de Dios, expresada en su ley, llega a ser el fruto natural de nuestra salvación.

   6. ¿Estaba familiarizado David con el hecho de que la salvación viene por la gracia?

   "David también dice ser bienaventurado el hombre al cual atribuye justicia sin obras, diciendo: Bienaventurados aquellos cuyas iniquidades son perdonadas, y cuyos pecados son cubiertos." Romanos 4: 6, 7.

   7. ¿Esté el creyente bajo la ley o bajo la gracia?

      "El pecado no se enseñoreará de vosotros; pues no estáis bajo la ley, sino bajo la gracia." Romanos 6: 14.

Nota: Están bajo la gracia los que han muerto al pecado. Lee Romanos 6: 3- 7. Ninguna persona puede ser salva por medio de su obediencia a la ley de Dios, sino mediante la gracia de Dios. Y él acepta el perdón que Dios nos da de gracia, no está más bajo la condenación de la ley.

   8. ¿Cuál es la condición de los que están bajo la ley?

      "Todo lo que la ley dice, a los que están en la ley dice, para que toda boca se tape, y que todo el mundo se sujete a Dios." Romanos 3: 19.

Nota: Los que están violando la ley de Dios, no están bajo la gracia, están bajo la condenación de la ley, y así son culpables ante Dios.

Conclusión: La Biblia dice quién nos ha dado la ley, "Uno es el dador de la ley, que puede salvar y perder; ¿Quién eres tú que juzgas a otro?." Santiago 4: 12. Cristo es el único que puede salvarnos. Lee Mateo 1: 21 y Hebreos 7: 25. Y el que es capaz de destruir también es Cristo, como está expresado en 2 de Tesalonicenses 1: 7- 9. Por lo tanto el autor de la gracia, también es el autor de la ley. 
 

jueves, 3 de julio de 2014

RECETAS: ARROZ CON GUISANTES A LA MILANESA



Hola amigos: aquí os dejo esta rica receta.

Ingredientes:

300 gramos de arroz integral
300 gramos de guisantes desgranados
1 cebolla grande
1 tomate mediano maduro
25 gramos de queso rallado
4 cucharadas de aceite de oliva
2 dientes de ajo
perejil
sal marina

Preparación:


  1. Dejar el arroz integral en remojo toda la noche. También se puede poner en remojo el mismo día, pero con agua hirviendo y durante una hora.
  2. Lavar y pelar la cebolla, el tomate, los ajos y el perejil. Picar muy menudito y por separado la cebolla, el tomate, los ajos y el perejil.
  3. En una sartén grande o paellera, se calienta el aceite y se rehoga la cebolla. Cuando empiece a dorar, se le añade el tomate, los ajos y el perejil. Sazonar a gusto y añadir tres tazas de agua.
  4. Cuando empiece a hervir, añadir el arroz (escurrido) y los guisantes. Cocer a fuego fuerte durante quince minutos. Reducir el fuego al mínimo pero vigilando que siga cociendo por toda la superficie. Seguir cocinando hasta que el arroz quede suave.
  5. Un poco antes de que el arroz esté cocido, agregar el queso rellado, y cuando la cocción haya terminado, apagar el fuego y dejar en reposo unos cinco minutos. En la segunda parte de la cocción del arroz, si el líquido se hubiera agotado muy rápidamente conviene tapar la sartén.


Valor nutritivo por ración:

glúcidos              79 g
Lípidos               19 g
Prótidos             15 g
Calorías           536
Julios            2.242